lunes, 25 de enero de 2016

EL PENALTI DE GELÁN.- El Real Betis empató ante el Real Madrid en el Estadio Benito Villamarín, pero Rubén Castro, en el tiempo de prolongación, tuvo en sus botas el gol de la victoria (1-1)

El Real Betis y el Real Madrid se enfrentaron en el estadio Benito Villamarín en encuentro correspondiente a la 21ª jornada de la Liga BBVA.
El partido entre los dos equipos realistas finalizó con el resultado de uno a uno (1-1). Pero el Betis pudo lograr la victoria cuando se jugaba el primer minuto del tiempo añadido Rubén Castro, que recibió un balón adelantado de Adán, se fue por velocidad de los defensores del Madrid hasta el área visitante y largó un zarpazo impresionante ante el marco defendido por Keylor Navas. Pero el balón, lanzado por el delantero bético, salió rozando el poste derecho de la portería del Madrid.
El Betis realizó un gran partido durante más de veinte minutos del primer tiempo. A los seis minutos llegó el golazo de Cejudo y el cuadro de Juan Merino hasta bailó algo a los madridistas. El Betis mandaba, controlaba, presionaba y llegaba con enorme peligro a los dominios de Navas en busca de otro gol y poder amarrar un buen resultado. Hasta pasada la media hora de este primer periodo no despertó el Madrid. Aunque Modric intentó calmar la situación, se encontró siempre muy solitario en su trabajo, porque Isco, James y Kroos no encontraban fórmulas adecuadas para dar una respuesta positiva a los de Heliópolis. 
En la segunda parte, el Madrid forzó su máquina y encontró fruto a sus continuas y prolongadas acciones ofensivas. A los 70 minutos, Benzemá logró el empate en una jugada ilegal, ya que cuando Kroos mandó el baló adelantado a James, éste estaba en fuera de juego. Pero el colegiado de la contienda, Martínez Munuera, dio validez al remate del francés. Aunque el Madrid buscó con ansiedad el gol de la victoria, con remates de Cristiano, Benzemá, James e Isco, el Betis se defendió con un trabajo ordenado para poder mantener a raya a sus rivales. Además, Adán, en zarpazos peligrosos de los hombres del Madrid, especialmente de Cristiano Ronaldo, siempre estuvo atento, resolviendo con paradas espectaculares y efectivas cualquier intento del equipo de Zidane de perforar su meta. La gran jugada del partido para el Betis llegó en el tiempo de la prolongación. En el minuto 91, Rubén Castro, cogiendo un balón para la contra enviado por Adán, se fue por velocidad de sus defensores para lanzar un zarpazo impresionante sobre el marco de Navas. Se cantaba el gol. Pudo ser el 2-1. Pero el balón rematado con enorme dureza por el delantero verdiblanco rozó el poste derecho de la portería del guardameta madrileño y se fue a la grada. Una ocasión de oro para una victoria que mereció el cuadro de Merino por el gran trabajo colectivo, la perfecta defensa de los colores, la presión y el control que ejerció el equipo durante los 94 minutos que duró el choque. El 1-1 final no marcó las diferencias. El Betis durante buena parte del partido jugó con más sentido práctico y con acciones muy vivas que pudieron derribar al coloso del Bernabéu. No cabe duda que es un punto de oro. Pero los verdiblancos merecieron más. Si llega a marcar ese gol Rubén Castro…

GOLAZO DE CEJUDO AL REAL MADRID
Solo se habían jugado seis minutos. Y el Betis logró batir al guardameta del Real Madrid Keylor Navas. Rubén Castro ya avisó en esta jugada que los verdiblancos querían golpear duramente al cuadro del Bernabéu. Y en esa jugada, Fabián, con habilidad, luchó por la pelota ante la defensa madridista para dejar un balón de oro a su compañero Cejudo. El delantero bético golpeó con fuerza y maestría un balón imposible para Navas. Golazo de Álvaro Cejudo. 1-0 para el Real Betis a los seis minutos del choque. Los hombres de Zidane quedaron sorprendidos. El Betis, desde que se puso la pelota el juego, se hizo el amo y señor del partido. Con clase, control, dominio y presión, los verdiblancos desbordaban a un Madrid que no sabía cómo superar a sus rivales. Ni Isco ni James eran capaces de centrar y serenar el juego para poder dar una adecuada respuesta a un Betis que controlaba todas las parcelas. En este primer periodo, el Madrid necesitó de 30 minutos para poder calibrar el duro daño hecho por el Betis al equipo de la capital de España. En ese querer y no poder llegó la acción más peligrosa para los béticos. Pero Cristiano, solo ante Adán, no supo superar al portero verdiblanco. A los 33 minutos lo intentó Pepe, cuando remató un balón en el lanzamiento de un saque de esquina. Hasta Benzemá reclamó un penalti, en el minuto 34, por una entrada de Petros dentro del área. El árbitro no vio nada a pesar de que estaba a pocos metros de esta jugada. Siempre fue el Betis superior al poderoso Madrid. Supo presionar de forma positiva y anticiparse en todo momento a los deseos de los hombres de Zidane de cambiar el percal por la seda. Los verdiblancos fueron más astutos, más hábiles y hasta en algunas contras llegaron con muchas ideas para seguir rompiéndole el molde a los madridistas.

RUBÉN CASTRO TUVO LA VICTORIA EN UN REMATE EN TIEMPO DE PRÓRROGA
El Madrid saltó al campo en este segundo tiempo con más ambiciones. Su meta, su propósito, era anular la ventaja del Betis, que mandaba por 1-0 en el partido. Los hombres de Zidane se pusieron a trabajar con un enorme espíritu de lucha. Entraron más en juego Isco, James y Kroos, y el Madrid se movió con más soltura y dominio sobre el terreno de juego. Merino hizo el primer cambio en el minuto 51. Fabián, algo tocado por los duros golpes recibidos, fue sustituido por Ceballos. En este periodo, el Betis, paciente y sólido, mantuvo su buen ritmo, acentuando sus esfuerzos en tareas defensivas. James ya quiso batir a Adán en el minuto 54, pero el portero madridista respondió con una buena parada. El Madrid siguió apretando con el intento de hacerle la vida imposible a un Betis que atinaba con todos sus buenos recursos futbolísticos. Movió otra vez el banquillo Merino y cambio a Kadir, tocado por Joaquín, en el minuto 57. Adán seguía haciendo impresionantes paradas a los duros remates de los hombres del Madrid. Fue tan insistente el equipo de Zidane en su tarea ofensiva que en el minuto 71 encontró el gol del empate. Kroos mandó un balón al área al lugar donde se encontraba James, en claro fuera de juego, quien pasó el cuero a Benzemá. El delantero francés superó la salida de Adán para marcar el tanto del empate a uno. El portero bético reclamó al juez de línea la situación ilegal de James en esta jugada, pero Martínez Munuera señaló el centro del campo. El Madrid empató a uno injustamente. 
Pese a todo, el Betis siguió fuerte en la pelea. Aunque el Madrid se fue la carga de la brigada ligera en el Villamarín, el cuadro de Juan Merino no perdió nunca la compostura. Hubo otro nuevo cambio en el cuadro verdiblanco. Cejudo fue sustituido por Portillo en el minuto 75. En la recta final, Adán seguía haciendo paradas a los balones rematados por James, Benzema y Cristiano. Y aunque los hombres de Zidane agobiaron a los béticos metiéndolos en el área para que se defendieran con uñas y dientes, en tiempo de prolongación, en el minuto 91, Rubén Castro realizó la jugada jamás soñada. Al recibir un balón enviado por Adán, el delantero bético se fue por velocidad de todos los controles madridistas en una contra de lujo, mandando un zarpazo al marco defendido por Navas. Pero el balón, duramente rematado por el delantero canario, se fue por el lado derecho del portal madridista, rozando la madera. Pudo ser el 2-1. Un gol para la merecida victoria verdiblanca.
El Betis, durante mucho más tiempo, jugó con más sentido práctico, con más eficacia y con una presión difícil de superar por sus rivales. Pudo lograr la gloria con este merecido gol de Castro que se cantó en las gradas del Villamarín. Pero el encuentro finalizó con ese empate a uno, con el gol válido de Cejudo y el tanto ilegal marcado por Benzemá, en el fuera de juego de James. 
El Betis causó muchas heridas a un Madrid con dudas y con reacciones tardías y con poca efectividad en el área rival. El cuadro de Merino dio siempre una buena imagen, impresionando su buen juego colectivo, su labor conjunta y su enorme y crecido espíritu de lucha. (Foto: RBB).

FERNANDO GELÁN

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