El Ayuntamiento de Sevilla firma un convenio de colaboración con la multinacional tecnológica CISCO para fomentar la vocación científica en las niñas y adolescentes

* La firma ha tenido lugar en el marco de la jornada G4G, siglas de “Greenlight for Girls”, que pretende fomentar la vocación científica en las niñas y adolescentes * El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, ha asistido al acto inaugural y ha visitado algunos de los talleres y actividades del encuentro El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, ha firmado un “Acuerdo de Intenciones” con la multinacional tecnológica CISCO, dentro de las jornadas G4G, el primer evento de estas características celebrado en Sevilla. Con este acuerdo, la multinacional se implica en la ciudad y realizará inversiones e iniciativas de innovación y formación en coordinación con el Ayuntamiento. Antes de la firma, Espadas ha intervenido en el acto inaugural junto con Melissa Rancourt, representante de Greenlight for Girls; José Manuel Petisco, director general de CISCO España, y Pastora Valero, directora general de Asuntos Públicos y Relaciones Institucionales para Europa, Medio Oriente y África. Espadas ha asegurado a las jóvenes participantes que "hoy hemos venido a ver una película en la que vosotras sois las protagonistas", y las ha animado a seguir derribando barreras, porque “hoy muchos aún piensan que las ciencias no son cosa de chicas, y cometen un gran error”. El alcalde, acompañado por la delegada de Economía, Comercio y Relaciones Institucionales, Carmen Castreño, así como por el resto de empresas e instituciones, ha visitado posteriormente algunos de los talleres y actividades dirigidos por voluntarios que han formado parte de la jornada. El programa Greenlight for Girls, organizado por CISCO, tiene como principal objetivo fomentar la vocación científica en las chicas de entre 11 y 16 años en las conocidas como STEM, siglas en inglés de Ciencias, Tecnologías, Ingenierías y Matemáticas. Estos eventos se organizan en los cinco continentes y congregan de media a 200 asistentes. El hecho de elegir a niñas para las jornadas se debe a que existe una necesidad de aumentar la presencia de mujeres en puestos de STEM, y además a que se piensa que los 16 son la mejor edad para tomar una decisión sobre el futuro de nuestra propia educación.